El ayuno que agrada a Dios

Ayuna de juzgar a otros, llénate del Cristo que vive en ellos.

Ayuna de palabras hirientes, llénate de la Palabra que da vida.

Ayuna de descontento, llénate de agradecimiento.

Ayuna de enojos, llénate de paciencia.

Ayuna de mentiras, llénate de vida auténtica y verdadera.

Ayuna de preocupaciones y nerviosismos, llénate de confianza en Dios.

Ayuna de quejarte, llénate de apreciar lo que te rodea.

Ayuna de presiones y prisas, llénate de oración y silencio.

Ayuna de amargura, llénate de perdón.

Ayuna de importancia de ti mismo, llénate de comprensión a los demás.

Ayuna de ansiedad personal, llénate de la paz de Dios.

Ayuna desaliento, llénate de esperanza en Jesús.

Ayuna de pensamientos pesimistas, llénate de la promesa del Señor que no falla.

Ayuna de todo lo que te separe de Jesús, ¡llénate de Amor!

Ayuna de todo lo que te separe del hermano, ¡llénate de solidaridad!