Vocación de caracolas

Estamos llamados a ser como las caracolas.

Aunque las saquen del mar,guardan dentro el ruido de las olas. Todo el océano puede resonar en un ser tan insignificante como una caracola.

¡Qué grandes nos ha hecho Dios siendo tan pequeños!

Toda la inmensidad de nuestro Dios puede resonar en la pequeñez de nuestro ser.

Que nuestra vida siempre tenga como fondo musical la ternura y bondad de nuestro Dios.

Que quien se acerque a la orilla de nuestro ser, pueda escuchar el eco de la Buena Noticia de Jesús de Nazaret